Lo ha dicho: Jonathan Swift (1667-1745)

"Cuando en el mundo aparece un verdadero genio puede reconocérsele por este signo: todos los necios se conjuran contra él"

28 de enero de 2016

Una sentencia histórica

Por Mario Conde

Lo de Bankia es gordo. El Supremo ha dicho ayer que las ventas de las acciones de esa entidad en su salida a Bolsa son nulas, de modo que los compradores pueden devolver los títulos y les entregarán el dinero que pagaron por ellos con sus correspondientes intereses. Una sentencia histórica.

Digo que el asunto es gordo, tanto cuantitativa como cualitativamente. Estamos hablando de un potencial de 1.800 millones de euros. Sabemos que la entidad lo tiene provisionado, es decir, que el dinero lo tiene guardado y descontado de sus cuentas de resultados. Ya, pero ¿con qué dinero ha efectuado esa provisión?. Pues con el que puso el Estado en su día, que si no recuerdo mal fueron unos 20.000 millones de euros, aproximadamente. Una cifra monstruosa que hubo que situar en las cajas de la entidad para reparar las inconcebibles pérdidas patrimoniales que logró acumular.

Digo inconcebibles porque uno, que tiene cierta experiencia en el sector financiero, sabe que para perder esa cantidad tan brutal de dinero hay que empeñarse mucho, porque no es fácil conseguir semejante despropósito. Pues a la vista está que lo lograron, y claro, como se aplica la historia esa de "demasiado grande para caer", el Estado tiene que poner el dinero, y como el Estado sólo lo gana a base de quitárselo a los contribuyentes, son los españoles los que pagan semejante factura. No se si en su día conseguirá el Estado recuperar algo de lo puesto. Pero, en fin, de momento, así están las cosas: una monstruosa cifra, una gestión inconcebible y unos paganos que son lo de siempre.

Pero el asunto es mas gordo cualitativamente. Vamos a ver: el Supremo ha dicho con lenguaje jurídico que las cuentas que presentaron son falsas. La frase es ese eufemismo de "no reflejaban la verdadera situación patrimonial y económica de la entidad". Vamos, que son falsas, que mintieron, que elaboraron unas cuentas irreales para engañar a los inversores. Por eso se anula el contrato de venta, porque se ejecutó con engaño. Y uno se pregunta, ¿cómo es posible?

27 de enero de 2016

Wild is the wind

Wild is the wind es una canción escrita por compositor ucraniano de bandas sonoras (Sólo ante el peligroDimitri Tiomkin. La canción fue grabada originalmente por Johnny Mathis para la película homónima de 1957. El tema fue muy popular y llego a estar entre las cinco nominadas al premio de la Academia.


En 1959, la cantante y compositora Nina Simone graba una versión muy particular. Frente a los menos de 2 minutos y medio de la versión original, Simone se atreve a mantener la tensión hasta los 7 minutos. 

En 1976, otro camaleón de la música, David Bowie, graba una versión de Wild is the wind para su álbum Station to Station. 

Bowie era un admirador del estilo de Simone, y después de conocerla en Los Angeles se inspiró en ella para grabar su propia versión acompañado de una guitarra eléctrica con efectos de ecualización acústica, bajo y batería. 


22 de enero de 2016

¿Para qué sirve el Rey?

Por Mario Conde

Una de las consecuencias derivadas de la situación actual ha sido traer a exposición pública el papel del Rey y su obligada consecuencia: preguntarse qué hace, qué puede hacer y para qué sirve.

Uno puede ser monárquico o republicano. Pero en cualquier caso debe contemplar con objetividad lo que estamos viviendo, y la conclusión mayoritaria es que en estas circunstancias el papel del Rey no es el mas brillante. Ya antes del proceso de consultas recibió algunas críticas, mas o menos fundadas, pero que se generalizaron, no sólo por su decisión de mantenerse totalmente ausente del debate actual, sino, además, por cuestiones puramente estéticas en el mensaje navideño. Pero ahora la cuestión es mas profunda.

Ha iniciado como marca la Constitución eso que llaman "consultas" y se ha encontrado con la sorpresa de que algunas fuerzas políticas con representación parlamentaria han dicho con luz y taquígrafos que no acuden a palacio porque "no es su rey". Vamos que niegan la Constitución, dicho claro y por derecho. Y lo dicen y nada sucede. Bueno, algo si: que erosionan la autoridad moral del Rey y no le dejan en buen papel.

Ciertamente es poco agradable contemplar al Rey recibiendo a grupos parlamentarios a consultas cuando todos sabemos que carece de poderes reales en este proceso. Las elecciones sirven para definir el Gobierno de la nación. De momento han fracasado, porque nadie tiene mayoría absoluta y las negociaciones pactistas no parece que van por buen camino. ¿Puede el Rey contribuir a solucionar este problema?

La respuesta es rotunda: jurídicamente no. Obvio que puede en secreto y en conversaciones privadas charlar, animar, sugerir y lo que se quiera, que el diccionario es muy amplio. Pero decidir, lo que se dice tomar una decisión, sencillamente no.

Eso de que el Rey propone el candidato a Presidente al Congreso de los Diputados es una mera formalidad sin contenido sustancial alguno. En la época de las mayorías absolutas el Rey se limitaba a proponer al líder del partido que la alcanzó. Punto y final. Solo podía hacer eso. Nada más. Y ahora que estamos en época de minorías sólo puede proponer al candidato que salga del consenso de los partidos. Sea quien sea. Siempre que existan posibilidades de ser aprobado por la Cámara.

Imaginemos que el Rey se considera capaz de tomar una iniciativa al margen del consenso de los partidos y propone un candidato, sea quien sea. Formalmente es una propuesta del Rey. ¿Qué pasa si el Parlamento no la aprueba? Pues que rechaza una propuesta del Rey. Eso me parece que en términos de sustancia política es grave, pero llevadero. Sin embargo, en el plano de imagen de la Monarquía — ya muy tocada — tendría consecuencias irreparables.

Así que la cuestión es: el Rey con sus consultas no puede decidir sustancia política alguna. No puede remediar esta situación. Su llamado poder arbitral es a estos efectos inerte. Es inevitable entonces que algunos se pregunten: ¿para qué sirve entonces el Rey? Y esa pregunta, en estos tiempos, horada el basamento de la monarquía, nos guste o nos disguste. Otra cosa es que unos consideren que eso es positivo y otros negativo. Pero en todo caso es lo que estamos viendo.

20 de enero de 2016

¿Qué gobierno tendremos si no hay nuevas elecciones?

Por Mario Conde

El mundo del dinero, y no sólo ese territorio, se preocupa seriamente de lo que sucede en España y de la salidas a la encrucijada en la que nos han situado las elecciones. Son dos las opciones que se comentan en los círculos que se suponen bien informados.

La primera, que se acabe por concretar un pacto a la portuguesa y tengamos un gobierno llamado de izquierdas. No son muchos los que conceden crédito a esa posibilidad.

Personalmente llevo tiempo diciendo en mis intervenciones públicas en Intereconomía que yo no la descartaría con tanta alegría. La principal consideración para ello es que matemáticamente es posible, aunque haya que pactar incluso con separatistas, lo que, en determinadas cabezas políticas, no es descartable, porque si aceptan dinero de regímenes totalitarios ya me diréis que escrúpulos van a tener en ese tipo de pactos.

Otro "activo" para ese pacto es que Sánchez, si no consigue ocupar poder, el que sea, pero poder, es hombre políticamente muerto. Por tanto, antes que morir cualquier cosa.

Lo negativo reside en el freno que puedan imponerle los barones del PSOE. No veo que por si solos puedan impedir ese pacto. Otra cosa es que fuercen un congreso y le destituyan, pero eso es mas fácil decirlo que hacerlo.

Ayer en Madrid se comentaba otra hipótesis a las que algunos conceden credibilidad. Se basa en lo siguiente:

19 de enero de 2016

All the Young Dudes

Mott the Hoople fue una banda británica de rock con fuertes raíces de rhythm and blues. Son populares por la canción All the Young Dudes, escrita para ellos por David Bowie.

Corría el año 1972 cuando los Mott the Hoople plagados de deudas y malos rollos, regresaban a Londres después de una penosa gira decididos a acabar con el grupo.

Su bajista Overend Watts, que quería tener un grupo para cuando Mott the Hoople se disolviesen, comenzó a buscar músicos y canciones y acabó llamando a David Bowie que a pesar de haber tenido mucho éxito con el tema Space oddity, todavía no era muy conocido y en esa época se dedicaba también a componer para otros artistas.

Bowie, que era un gran fan de la banda, ya les había enviado a los Hoople su tema Suffragette city para que lo incluyesen en su anterior disco, pero estos lo habían rechazado. Cuando se enteró de que Mott the Hoople tenía los días contados les ofreció una canción que acababa de componer y de la que sentía realmente orgulloso, el tema en cuestión se llamaba All the young dudes.

All the young dudes sonaba mucho a Bowie y Mott the Hoople quisieron poner su sello personal, llegando a crear el mítico riff inicial y la épica parte final que hicieron a la composición más buena todavía, si cabe, además de formar parte en los créditos de la misma como co-autores.

El tema llegó al nº 3 en las listas Británicas y con el paso del tiempo se convirtió en un himno generacional de todos aquellos jóvenes que vivieron la etapa dorada del Glam. 

Pese a todo, la mala suerte continuó su camino junto a la banda, donde volvieron a aflorar problemas personales que desembocaron en la disolución del grupo  tan sólo dos años después.


All the Young Dudes ha sido versionada por varios artistas como Bruce Dickinson, Ringo Starr, Ozzy Osbourne, Billy Bragg, Mick Ronson... entre otros. 

Hoy les traemos la versión que el propio David Bowie incluyó en el álbum David Live de 1974.


11 de enero de 2016

Pelear a muerte por la independencia.

Por Mario Conde

Siempre dije que el independentismo iba algo mas allá de una pura y dura ideología para alcanzar casi la categoría de una suerte de religión. Y que todo, absolutamente todo, quedaría subordinado a la idea de conseguir o cuando menos pelear a muerte por la independencia.

Bien, puesto esto ha quedado en evidencia en Cataluña. Guste o disguste, el Parlamento catalán tiene mayoría de elementos personales que quieren la secesión de Cataluña. No hablo de votos. Me refiero a escaños. Y esto es sencillamente innegable. Y deberíamos ser prudentes en el juicio e incluir en ese grupo, al menos colateralmente, a los que dicen no defender la independencia pero abogan por un referéndum de autodeterminación, como sucede con Podemos y sus sucedáneos.

Estaba claro para algunos que si se repetían las elecciones en Cataluña es posible, incluso probable, que el parlamento que naciera de las nuevas elecciones careciera de esa mayoría independentista. De suceder algo así el proceso secesionista quedaría paralizado. Este pensamiento es el que ha dominado la negociación para designar a un candidato a la Generalitat. Yo sostuve que finalmente la CUP acabaría apoyando la investidura de Mas. Me he equivocado. A la vista está. Pero tenemos que ser agudos para analizar lo ocurrido y no dejarnos llevar por apariencias.

Si la CUP provocaba nuevas elecciones seguramente sería responsable de la paralización, quizás definitiva, del proceso secesionista, y eso le costaría la vida como partido. Así que ese escenario no era lógicamente previsible. Lo mismo sucedería con Mas que quedaría definitivamente anulado como “prócer” del independentismo, porque ese sueño de independencia quedaría liquidado al no tener un parlamento con mayoría de diputados que persiguieran la secesión. Por tanto la decisión de los independentistas es clara como el agua: continuar con la secesión.

8 de enero de 2016

Seré Chateaubriand o nada

Fue uno de los escritores más importantes del siglo XIX y uno de los intelectuales con mayor influencia en la política europea.

Su obra Los miserables sigue siendo un superventas y un éxito en la taquilla de cines y teatros. Pero su vida privada, llena de amantes, infidelidades y tragedias, es poco conocida, pese a ser tan apasionante o más que sus novelas.

Nació en Besanzón el 26 de febrero de 1802 y aunque la mayor parte de su infancia transcurre en París, estuvo un tiempo en España, acompañando a su padre, que era general francés al mando de José Bonaparte

Durante su estancia en España, Victor Hugo se enamora del paisaje español. Su mayor pasión en la infancia era pintar. Lo hacía en cualquier momento, y conservaría su afición durante toda su vida. La afición de escribir le llegó fuertemente con 14 años, y decidió que ése iba a ser su verdadero trabajo y pasión. A esa edad dijo: "Seré Chateaubriand o nada".

Con sólo 17 años, fundó su propia revista, "El Conservador literario". Aunque teóricamente hacía la revista junto con sus hermanos, él era el único que escribía, pero lo hacía con nada menos que con 11 seudónimos diferentes.

Con 28 años, un editor le encarga escribir una novela a toda prisa. Le promete una gran cantidad de dinero y su inmediata publicación, pero le exige rapidez, ya que necesita la novela en ese mismo año. Victor, que pensaba que en el trabajo lo más importante era la esperanza y el esfuerzo, se metió en su habitación y pasó meses escribiendo la novela. Al fin, con los pelos alborotados y delgado de no comer, presenta su primera gran creación: Nuestra Señora de París.

Una de las ideas que solía defender era la unificación del país. Pero no la unificación de Francia, sino de la unificación de ese gran país que era Europa. El visionario Victor pensaba que Europa podía unificarse, a pesar de la enemistad entre Francia y Alemania: "Una guerra entre países europeos sería una guerra civil".

Organizó una resistencia contra Napoleón III, por lo que fue exiliado a Bruselas. Allí, empieza a satirizar y a burlarse de su figura con obras como "Napoleón el pequeño" por lo que se convirtieron en grandes enemigos.

En su exilio, entró en uno de sus mayores momentos de inspiración publicando su mejor obra: Los Miserables.

5 de enero de 2016

Tú dices...

Por Rosario Pato y Cid
Caminos de (V)ida y Vuelta




Can't Help Falling in Love

Can't Help Falling in Love es una canción compuesta en el año 1961 por George David Weiss, Hugo Peretti y Luigi Creatore e interpretada por Elvis Presley para la película Blue Hawaii.

Está basada en la composición clásica francesa Plaisir d'amour de Jean Paul Égide Martini.

El sencillo permaneció 14 semanas en las listas de éxitos Billboard alcanzando el número 2 en Inglaterra.

La canción fue utilizada por Elvis Presley para cerrar sus conciertos en vivo, al igual que lo haría años después Celine Dion.

El tema fue usado en el comercial navideño de Coca-Cola en 2008.


En 1993, el grupo inglés de música pop reggae UB40 la editó como primer sencillo de su álbum Promises and Lies. Esta versión aparece en la banda sonora de la película Acosada.